Este año he tenido un bloqueo lector, un bloqueo creativo, un bloqueo de energía en general. No sé si llevo uno o dos libros este año pero el último que leí (y quizás el único hasta ahora) ha sido amanecer en la cosecha. No lo recomiendo a menos que quieran sufrir mucho (obvio sí lo recomiendo, es un gran libro y los juegos del hambre SIEMPRE será mi saga favorita). Se me hace muy curioso este bloqueo creativo que he tenido últimamente porque soy de la idea que cuando te sientes como estancada en ese aspecto es cuando más necesitas crear, hacer, decir.
Esta constipación lectora, escritora, etc. no es casualidad, últimamente me he cuestionado mucho en donde estoy parada y hacia donde voy/quiero ir. Me encanta tener a personas en mi vida que me recuerdan lo privilegiada que soy, que me ponen los pies en el piso y que al mismo tiempo me dejan soñar. Siempre se me ha dado más soñar que concretar, me considero una persona muy responsable pero al mismo tiempo me conflictúa mucho la estructura, sentirme atrapada en un esquema Y A LA VEZ amo tener una rutina establecida en mi vida. En resumen, estoy hecha de contradicciones como todo el mundo.
Cuando pienso en escribir, mi deseo tiene que ver con conectar. A veces cuando estoy escribiendo algo me encuentro a mí misma preguntándome ¿y esto quién lo va a querer leer? Pero quiero que en este camino -del artista- mi voz se mantenga lo más auténtica posible, esto soy y si te ayuda, si conectas, si te resuena, si quieres mandarme un DM y cotorrear (lo que más me gusta en la vida es hablar) ya estamos del otro lado.
Hace poco comencé a leer el camino del artista, libro que tenía guardado en mi Kindle desde hace meses y en el cual no conseguía sumergirme. La verdad todavía no lo consigo pero estoy tratando y supongo que este blog, esta pieza de escritura introspectiva y creativa tiene que ver con esas ganas. El camino del artista es un libro como de autoayuda. No al estilo de Paulo Coelho sino como una guía práctica para que por fin te deshagas de esa constipación, ese bloqueo creativo (incluso lector).
En la primera parte del libro la autora aborda un ejercicio llamado las páginas matutinas. Las páginas matutinas son muy simples y consisten en escribir sobre tres cuartillas todos los días por la mañana. Cabe mencionar que este libro no es para escritores particularmente, está dirigido a artistas. A mí que lo que me gusta es escribir así que me encanta esta tarea, y me asusta y me pone nerviosa también. Cuando te quieres dedicar a la escritura de cualquier tipo es normal ponerle demasiado peso a las palabras, a las ideas. Si alguna vez viste Girls (HBO) de Lena Dunham (no sé porque la gente la odia, si alguien puede me explica) entenderás que all adventorous women do! La verdad yo no la terminé pero me encantó esa frase porque pues sí, no todo lo que hagas tiene que ser perfecto ni tener un sentido ni tienes que ser la siguiente voz de tu generación (tú no, yo sí tengo que serlo porque ese es el tipo de expectativas que pongo sobre mí cuando quiero hacer algo). Sólo tienes que hacerlo.
En fin, que las páginas matutinas son una especie de vaciado mental. De poner en papel todo eso que traes en la cabeza antes de comenzar tu día, de dejar fluir las ideas (sean las que sean) mientras escribes. Se supone que no debes de pensar mucho en qué quieres decir, las páginas matutinas son para ti nada más. Mi único tema con las páginas matutinas es que -idealmente- deberían de ser lo primero que hagas al empezar tu día y mi día ya empieza lo suficientemente temprano como para incorporar esa actividad en este momento. Así que estoy pensando cómo adaptar esta actividad, quizá sea lo segundo que haga en mi día, o lo tercero, pero es un ejercicio que definitivamente quiero incorporar a mi día a día. La autora cuenta una y mil historias sobre como las páginas matutinas transformaron drásticamente la vida de todas las personas que empezaron a incorporarlas a su vida.
¿Me siento un poco escéptica con el tema de las páginas matutinas? Sí. ¿Pienso intentarlo de cualquier manera? También sí. Porque nada sería peor que no intentar y seguir en un loop de doomscrolling de por vida sin realmente consumir contenido que me aporte y peor aún sin crear contenido que aporte a las demás personas. Vómito verbal. En fin, iré documentando mi camino del artista conforme vaya transcurriendo, ya les contaré sobre las demás herramientas y sobre los cambios (o falta de ellos) que aparezcan en mi vida tras adoptar un nuevo hábito.
Qué emoción, te veo pronto <3
Wow! Voy a leer el libro, suena muy interesante Sofía!
Aquí te leemos y apoyamos amiga! Estoy segura que después de este bloqueo vas a crear cosas aún más cool. Tqm